martes, 11 de septiembre de 2018

Texto de apoyo y Trabajo Práctico Unidad II parte B


La influencia del marxismo y los clásicos de la sociología crítico-reproductivista de la educación

Llamada de flecha hacia abajo: RELACIONES DE FUERZA ENTRE CLASES DOMINANTES Y DOMINADASAunque en forma alguna pueda pensarse que K.Marx haya contribuido de manera directa a la reflexión sobre la educación, su importancia deviene de las aplicaciones de sus teorías sobre el capitalismo a los más diversos ámbitos de la vida social. La herencia del pensamiento marxista ha sido revalorizada en Europa al combinarla con hallazgos y desarrollos teóricos de diversas disciplinas (el psicoanálisis, la teoría literaria, la estética, la filosofía existencialista, la fenomenología, etc.) en el periodo de entreguerras por la Escuela de Frankfurt (Adorno, Horckheimer, más tarde Marcuse) y en la conmocionada década del 60 a partir de los trabajos de Althusser (y luego por Goldmann, Godelier,  Badiou) influido por el estructuralismo de la lingüística y la antropología. Asimismo, en Italia fue exhumado el pensamiento de A. Gramsci en el último medio siglo inaugurando un renovado interés del marxismo por las cuestiones políticas y culturales, cuestión está también jerarquizada por el enorme trabajo de los “historiadores” ingleses (Thompson, Williams, Stuart Hall). Aunque es fácil decir hoy que el marxismo casi no tiene preeminencia en ningún centro académico importante del mundo, eso no significa que no haya impregnado de diversas y sorprendentes modos casi todo el pensamiento crítico contemporáneo y que en diversos discursos científicos no se encuentren restos o huellas de este pensamiento.

El punto de partida de la lectura marxista de la educación es la noción de “superestructura” jurídico-político-ideológica, y la fórmula fundamental del materialismo histórico: “No es la conciencia la que determina al ser social, sino que es el ser social el que determina la conciencia”. La conciencia de los hombres, las representaciones que se hacen del mundo, sus ideas, conocimientos, etc. reflejan, expresan o dan forma al modo en que los hombres producen su vida social y material. Los hombres llegan al mundo en condiciones que ellos no han elegido ni controlan, el orden social preexiste a la voluntad individual, y las ideas que los hombres se hacen del mundo dependen más de cómo es ese mundo que de cómo es la mente de los hombres. El ordenador esencial del mundo es en el marxismo el "modo de producción de la vida material", es decir las relaciones que el hombre mantiene con otros hombres y con las cosas en el trabajo y en la naturaleza, que constituyen la infraestructura o base económica de una sociedad en la que se definen las clases sociales (amos/esclavos, señores/siervos, obreros/burgueses) a la que corresponden una serie de instituciones, creencias, cultura, etc., es decir una superestructura donde naturalmente se coloca “la educación” y que tiene por finalidad reproducir en la mente, las creencias, los pensamientos y las leyes y conductas de los hombres, el modo de producción de la sociedad y el predominio de la clase dominante en la misma. "Las creencias e ideas dominantes en una sociedad son las ideas y creencias de sus clases dominantes".

Según estos grandes principios teóricos, la educación es una actividad de la superestructura, controlada por las clases dominantes, que procura la perpetuación en la mente de los sujetos del orden social de dominación y explotación.

Sin embargo, tomar al pie de la letra estas proposiciones fundamentales equivaldría a renunciar al cambio histórico. Marx concibe el dinamismo histórico como producto de una doble juego de contradicciones. Por un lado, dentro de la infraestructura económica la contradicción entre las fuerzas productivas (especialmente la ciencia y la tecnología, la organización social del trabajo) y el modo de apropiación de la riqueza (las relaciones de propiedad). Por otro lado, la relación base/superestructuras también está animada por una contradicción: el desarrollo de un modo de producción o su agotamiento hacen obsoletas las instituciones, leyes y formas ideológicas que hereda o que arrastra del pasado, por lo que las tendencias al cambio son tan importantes como las tendencias a la reproducción.

Este carácter “dinámico” de los planteos clásicos de Marx se ve en una de las pocas referencias de K. Marx a la educación, la importante 3era. Tésis contra el materialismo de Feuerbach que data de 1845: “La teoría materialista del cambio de las circunstancias y de la educación olvida que las circunstancias las hacen cambiar los hombres y que el educador necesita a su vez ser educado... la coincidencia del cambio de circunstancias con el de la actividad humana o cambio del hombre mismo solo puede concebirse y entenderse como práctica revolucionaria”. Aquí podemos ver que el cambio de las circunstancias es el verdadero “educador” del hombre tanto como que el hombre es el que llega a cambiar las circunstancias a través de la práctica revolucionaria.

Dentro de la tradición europea del marxismo tenemos varios hitos conceptuales que no por no estar incluidos en el programa y los textos son menos importantes.

1) Gramsci introduce la idea de “hegemonía”. Las clases dominantes no se imponen solamente por la superioridad de medios materiales y la represión, sino que se muestran capaces también de conquistar el consenso o al menos el consentimiento de las clases subalternas. Para ello deben ser capaces de presentar sus intereses particulares como intereses “generales” como “bien común a todos”, y deben ser capaces de introducir esta idea como “sentido común” cotidiano en las mismas clases subordinadas. Las clases dominantes usualmente intentan asumir la “dirección moral e intelectual” de la sociedad no solo persuadiendo e inculcando sus propios valores y persiguiendo o suprimiendo los valores antagónicos, sino también integrando o captando para sí (apropiándose de) los valores o creencias de los subordinados. La construcción hegemónica es una verdadera “colonización” de la vida mental y cultural y uno de los medios más importantes de esta empresa son las instituciones educativas.

2) Althusser complejizando la noción de “hegemonía” introduce la idea de “aparatos ideológicos del estado”. El Estado reproduce el orden social no solo mediante sus aparatos represivos y jurídico-políticos, es decir, mediante el monopolio de la fuerza, la autoridad y la ley, sino por medios ideológicos de aceptación del orden social. El estado contemporáneo es una compleja trama de instituciones que tienen por función lograr que los individuos piensen y se representen su realidad de manera compatible con el sostenimiento del orden social. No solo las escuelas, sino también la prensa, los medios de comunicación, las iglesias, la publicidad, etc. están destinadas a dos grandes tareas de reproducción “ideológica del capitalismo”: a) “interpelar a los individuos como sujetos” que significa que todas estas instituciones nos “hacen creer” que el orden social es producto de nuestras elecciones como sujetos (elegimos nuestros gobiernos, elegimos si estudiar o esforzarnos para tener éxito, elegimos lo que consumimos, etc.) y b) “establecer relaciones imaginarias con nuestras condiciones reales de existencia”: todas estas instituciones tienden a ocultar, disfrazar y desfigurar la realidad de la opresión, la alienación y la explotación a la que estamos sometidos (por ej. comprar una ropa o zapatillas de marca o un celular a colores, aparecen como la forma de la “realización personal” ocultando las realidades que operan por debajo de ellas: trabajo esclavo de talleristas bolivianos, trabajo infantil en países asiáticos, dejar sin empleo a trabajadores locales, etc.).

No vamos a desarrollar sino solo a mencionar otros aportes como los de Lukacs sobre la noción de “falsa conciencia”, y el de Adorno, Marcuse y otros de “alienación”.

Hacia fines de los 60 aparece el texto que Uds. tienen en la bibliografía obligatoria “La reproducción...” de P. Bourdieu y J.C Passeron (en adelante B&P) y que constituye uno de los clásicos de la sociología de la educación en general, y quizás el progenitor de todas las teorías reproductivistas en general. Si Althusser había analizado el papel del estado y de la educación como una de sus instancias, lo había hecho desde una visión de conjunto de la sociedad capitalista. B&P analizan resueltamente la arquitectura interna del hecho pedagógico mismo desde un punto de vista inspirado en el marxismo, aunque en diversos puntos se aleja del mismo. B&P buscan la “reproducción” del orden social de dominación no en el papel que cumple la educación en un sistema  general, sino en la misma constitución interna de la “acción pedagógica”.

El texto obligatorio está compuesto por fragmentos seleccionados, no se preocupen por las partes truncas. Tiene una estructura expositiva muy particular: son proposiciones ordenadas según un nivel de generalidad ascendente y un nivel de especificación descendente. Dentro de la bibliografía hay un Gráfico de mi autoría que sintetiza con un diagrama de flujo las relaciones entre las proposiciones.

Es quizás el texto que más cuesta a los alumnos  no solo por su tipo de escritura y elevado nivel de abstracción, sino porque sus ideas escapan al sentido común y son difíciles de captar. Por ello acompaño este texto con el de E. Tenti, que explica de manera más llana el sentido de las principales ideas de los franceses.

Es esencial la comprensión de la proposición 0: la “violencia simbólica” que ha hecho historia en la sociología y es el núcleo de la teoría. Según ella, toda acción pedagógica es de naturaleza impositiva pero oculta la realidad que la fundamenta: el poder material de una clase sobre el resto. La educación agrega mediante este ocultamiento un plus simbólico a la dominación de clase, he ahí la “violencia” sublimada en una imposición a través del flujo simbólico controlado de la escuela cuyo efecto fundamental es invisibilizar y con ello naturalizar las relaciones de dominación entre clases.

Especificando la idea de violencia simbólica aparece la proposición de la educación como “imposición arbitraria de un arbitrario cultural”. Toda educación está basada en una arbitrariedad, no hay valores universales que puedan fundamentarla, sino solo el predominio de una clase y sus arbitrarios sobre las demás. Pero esta dominancia arbitraria debe disfrazarse de “universalidad”, “necesidad”, “orden natural”, etc.

Es fundamental entender el carácter intrínseco de esta idea: no es que la burguesía “obligue” a docentes, escuelas, etc. a inculcar sus ideas, sino que el hecho pedagógico mismo reproduce de manera no intencionada e inevitable el arbitrario cultural.

Para entender esto es necesario comprender exactamente las paradojas de Demóstenes (el maestro no puede “confesar” el carácter arbitrario y “mentiroso” de su saber sin caer en contradicción y negarse como maestro) y de Entidemo (el alumno no puede saber lo que no sabe sin caer en contradicción) en que se encuentra prisionera toda acción pedagógica: si se produce el encuentro entre alguien que no sabe lo que no sabe (el alumno) y alguien que sabe lo que no saben (el maestro) no puede no haber “violencia simbólica”: el maestro va a ratificar el no saber previo del alumno y tratar de “colmarlo” desde una universalidad de saber que vela su arbitrariedad.

Otras nociones fundamentales que han hecho historia son “la autoridad pedagógica y su autonomía relativa”, el “ethos” pedagógico en las clases dominantes y dominadas, el trabajo pedagógico primario y secundario, y el concepto de “habitus” y sus atributos (permanencia, exhaustividad y transferibilidad) aún vigentes en diversas ramas de las sociología contemporánea.

El concepto de “habitus” ha echado raices en las ciencias sociales y su campo de utilización es inmenso desde la sociología de la cultura hasta la sociología política. Tiene el enorme atractivo de su generalidad proveniente del hecho que no separa al sujeto de la estructura. El habitus es una formación mental del sujeto que intenta explicar las prácticas sin renunciar a la incidencia del mundo social objetivo. El habitus es cómo tal una hipótesis teórica que permite interpretar aquellas prácticas que reproducen las estructuras sociales de acuerdo a las formas de inculcación o socialización a las que estas mismas estructuras expusieron al sujeto. Es decir, constituye la forma subjetivada o incorporada de las estructuras objetivas, y al mismo tiempo da origen a las prácticas o formas objetivadas mediante la acción de reproducir las estructuras.





 Así la forma de encontrar una mediación teórica entre sujeto y estructura a través de la práctica, es pensarla como “habitus”. No debe confundirse el habitus con hábito, costumbre o conducta repetitiva inculcada, el habitus tiene un carácter flexible, adaptable, no son respuestas fijas, puntuales, específicas, sino principios generadores de prácticas afines a las condiciones de reproducción de estructuras sociales. En este sentido, los habitus incorporados en la escuela se adaptan y acomodan a nuevos ámbitos sociales en un proceso de retroalimentación flexible y de trasponibilidad entre contextos y situaciones. La fortaleza de un habitus se demuestra por su capacidad de activarse en situaciones y contextos que son en gran medida heterogéneos entre sí. Es decir, el habitus logra captar lo común entre situaciones diversas y logra predisponer a la acción de forma de preservar esencialmente los principios de la estructura social dominante.

Más acerca del habitus. Algunas aclaraciones

El concepto de habitus  es una elaboración teórica que permite acceder a las formas en que las estructuras sociales se convierten en estructuras  mentales individuales.  No abarca  solo “conceptos” en el sentido de ideas racionales, o valores morales, etc.  sino “afectos”, “posturas corporales”, “actitudes”, “mecanismos cognitivos” y cualquier tipo de disposición que sea relevante para reproducir un orden de dominación. Esto es importante: los habitus son disposiciones duraderas, transferibles y exhaustivas, fruto de procesos de inculcación (trabajo pedagógico, autoridad pedagógica), que aseguran -o al menos tienden a asegurar- que nuestras prácticas y comportamiento social sea congruente, reproduzca o -al menos no atente contra- el orden social establecido, es decir, las relaciones de fuerza entre clases que dan origen a las acciones de inculcación y la violencia simbólica que está en su base. Los habitus son las estructuras interiorizadas que generan las orientaciones de conducta que nos hacen adaptar y ser funcionales a un orden social. El orden social se reproduce a través de nuestras conductas estructuradas mediante los habitus inculcados que se han hecho carne en nosotros violencia simbólica mediante.

No hay que confundir los habitus con “contenidos fijos” de conceptos, emociones o usos del cuerpo.  Incluso la obra de Bourdieu partiendo de Aristóteles comienza enfatizando la forma en que se inculcan los usos, las posturas o posiciones y movimientos corporales.  Pero las conductas concretas sean corporales, emotivas o intelectivas pueden ser analizadas como habitus no por el grado de pregnancia, arraigo o repetición, sino cuando su sentido es reproducir el orden social y las relaciones de fuerzas establecidas.
Los “habitos”, “costumbres”, “actos reflejos”, no constituyen “habitus” por el mero hecho de estar incorporados y repetirse, sino porque se inscriben de forma eficazmente reproductiva en un orden social. 
El carácter de habitus se ve en la forma específica que adopta tal o cual conducta y no en el contenido repetitivo mismo de la conducta. El habitus permite acceder al sentido (socialmente reproductivo) de nuestros comportamientos, es decir a aquella matriz de disposiciones que explica la forma particular que asume nuestra conducta social. Ej: para un chico de 10 años  hacer cuentas o resolver problemas de regla de tres simple en la escuela para aprobar una prueba y  hacer cuentas y resolver problemas de regla de tres simple para recoger y vender carton, moviliza habitus distintos aunque el contenido intelectivo sea el mismo. Las disposiciones que se activan en uno y otro caso son completamente distintas y obedecen a procesos de inculcación y socialización distintos.  Por eso puede haber chicos que no fallan al hacer  cálculos concretos con billetes y balanzas y fallan cuando se les presenta el mismo problema sobre el papel o el pizarrón.  También ocurre al revés, algún chico puede ser muy brillante para manejar números en la escuela pero sumamente confuso para calcular vueltos en el supermercado.  Los habitus no deben interpretarse como conductas fijas puntuales sino como matrices de disposiciones que explican eso que hace que una conducta reproduzca algún aspecto de las relaciones sociales y el arbitrario cultural. El ejemplo típico de la campana, la marcación del tiempo, la formación de entrada o salida en la escuela no son cosas que los chicos vayan a hacer en otros ámbitos y sin  embargo tienen un gran poder de estructurar estas matrices de disposiciones que se van a activar más tarde en situaciones completamente distintas. La puntualidad y el reconocimiento de que los ritmos de la vida social quedan a cargo de las instituciones; la obligatoriedad de exponerse a la mirada de la autoridad, “obligación de no esconderse”, etc. pueden ser interpretados como formas de pautar segmentos de nuestra conducta social para que no caiga en contradicción con los imperativos del orden dominante.

Para seguir con la matemática,  en Japón la técnica de cálculo operativa con el ábaco modifica el habitus racional de hacer operaciones mentales con números, convirtiéndola en operaciones manuales y visuales correlativas.  Obsérvese que un niño japonés en nuestras escuelas tendría 0 en matemática porque la escuela aquí inculca otros habitus de trabajo con números. Lo que la escuela evalúa no es la “operación mental” matemática sino determinado tipo de operación mental, estructurada de determinada manera. El habitus dominante occidental maximiza la separación entre lo intelectual y lo manual (mover con las manos las cuencas del ábaco), mientras que el oriental no lo hace. Los habitus cognitivos para el cálculo seguramente están cambiando aceleradamente en occidente producto de la generalización del uso de dispositivos digitales. El habitus matemático ya no es el que apunta en la resolución en papel y lápiz, sino en una pantalla usando un software y un teclado. Los currículos de materias como matemáticas pueden estar sesgados (por los contenidos que seleccionan) hacia destrezas de cálculo ligadas al álgebra financiera, hacia la estadística, hacia la resolución de problemas de eficiencia productiva, hacia problemas de ciencias naturales, física, etc.   

Los mismo pasa en Lengua: determinadas palabras (son "malas", no pueden pronunciarse), determinadas formas de hablar (especialmente de las clases populares, minorías étnicas, etc.) son "incorrectas" o menospreciadas, y determinadas manifestaciones literarias son denigradas o directamente rechazadas (la rima popular, la picaresca, los cánticos de cancha, la cumbia villera, etc.). Sin dudas todos somos objeto de inculcación de habitus linguísiticos acerca de la forma de hablar, de escuchar, de pronunciar, de combinar las palabras, de seleccionarlas, etc. Por eso cuando nos topamos con alguien del interior o de culturas con habitus distintos (aunque siempre dentro de la lengua castellana) no terminamos entendiéndoles y consideramos que hablan mal o no saben hablar. 

Por todo ello cuando se pide un ejemplo concreto de habitus no se pide una conducta específica concreta que se diferenciaría de otras “no habitus”, sino por la forma en que cualquier conducta está moldeada de forma tal que reproduzca el orden social dominante. El habitus está allí en muchísimas conductas como una forma de entender el destino final (en las conductas y actitudes que vamos a adoptar en el resto de nuestras vidas) de lo que nos inculcaron y de la violencia simbólica a la que fuimos sometidos.

Un tipo especial de habitus para analizar es el de las animadversiones, los rechazos, lo que nos produce inmediata irritación y repugnancia. La selección de las conductas que estamos inculcados para rechazar (desde los modales, hasta el robo) también son moldeados por los habitus: nos produce gran indignación que un adolescente pobre arrebate un celular en un tren, no nos produce tanta indignación que las empresas de celulares nos cobren una y otra vez toda clase de cargos. Produce indignación que la AUH se la gasten en zapatillas o celulares, pero no produce tanta indignación, sino incluso a veces admiración, que las divisas que el país consigue dificultosamente con las exportaciones se gasten en viajes al exterior y en autos o bienes de lujo importados. 

En realidad, Bourdieu seguramente estaría de acuerdo en plantear que el habitus nunca se limita o reside simplemente en conductas concretas, en sus características  "objetivas" sino en cómo relacionamos esta objetividad con otras cosas que no están en la conducta concreta y que esa relación permite agrupar o vincular series de comportamientos que son relevantes para el mantenimiento del orden. Fíjense que si la teoría, los conceptos, son correspondencias con las cosas particulares del  mundo, no hay que pensar demasiado. El habitus obliga a pensar porque es un concepto que intenta establecer un puente entre la "concretez" particular de cualquier conducta con todas las demás conductas relevantes para mantener determinado orden social, y esas conductas no están incluidas en la conducta ejemplificante. Solo podemos acceder a ejemplificar el habitus "analizando" y no invocando "hechos" u objetos del mundo que satisfagan condiciones del concepto. Todo ejemplo de habitus incluye su incorporación analítica a una serie de disposiciones y acciones posibles como respuestas a problemas del orden dominante. 

Por supuesto que los habitus no son producto de programas o acciones específicas de inculcación deliberada: ¡¡¡¡no figuran en los programas ni en las mentes de las maestras!!!! Los habitus son trasmitidos a través de lo que muchos de Uds. seguramente llaman el “curriculum oculto”, como forma insensible de asimilación, como pedagogía invisible, como afinidad o familiaridad. Cuanto más pensamos que algo es “natural”, “tiene que ser así”, “no puede ser de otra manera”, etc. más significa que ese comportamiento está determinado por habitus bien arraigados y sin contradicciones. Analizar nuestras conductas como habitus nos obliga a vernos como “extraños” a nosotros, nos obliga a desnaturalizarnos y concebirnos como depositarios de habitus y moldeados por la violencia simbólica de las agencias de dominación: familia, escuela, medios de comunicación, etc.

En definitiva, dada una conducta, una práctica social extendida, cualquiera sea, el concepto de Bourdieu nos lleva a pensar en su génesis: las inculcaciones de la que provienen y a qué aspectos del orden social contribuye a reproducir.

Se han hecho diversos cuestionamientos críticos al concepto y a los usos muchas veces abusivos del mismo. Un primer cuestionamiento es que hay una cierta falacia o defecto epistemológico: el habitus rara vez es estudiado de manera directa sino a través de las prácticas que se supone son explicadas por el habitus inculcado previamente. En este sentido, es un “economizador” empírico ya que permite soslayar el trabajo incordioso de estudiar detalladamente a lo largo de muchos años los procesos de inculcación y luego en qué prácticas concretas de los individuos se vuelcan o no esos trabajos de inculcación.

Otro cuestionamiento es al carácter omniexplicativo y homogeneizador del habitus. Los individuos suelen estar expuestos a socializaciones e inculcaciones variadas y contradictorias. Su arsenal de habitus lejos de ser consistente está atravesado por una pluralidad tensa y la activación de los habitus depende de situaciones y tiempos particulares y no de una ley general. Así Lahire subraya los fenómenos de adormecimiento, inhibición, activación, compensación y otros, por los cuales los esquemas generadores y organizadores de nuestras prácticas difícilmente puedan ser leídos de manera lineal y uniforme.

TRABAJO PRACTICO (COLGAR ANTES DEL VIERNES 26/4)

Consigna 1)  Piense en su tema de trabajo final e intente identificar o detectar (aunque sea de manera tentativa o hipotética) habitus y elementos de violencia simbólica en el mismo.

RECUERDE QUE HABITUS SIGNIFICA RELACIONAR LAS PRACTICAS CON LA REPRODUCCION DE UN ORDEN SOCIAL QUE PRODUCE ASIMETRIAS ENTRE LAS CLASES A LAS QUE PERTENECEN LAS PERSONAS.
PARA DETERMINAR EL HABITUS HAY QUE PREGUNTARSE QUÉ PARTE DEL ORDEN SOCIAL Y DE ESTAS ASIMETRIAS REPRODUCE LA PRACTICA QUE ANALIZAMOS

32 comentarios:

  1. Rocío Zarate
    Pienso en este tema:
    Como en un contexto de crisis económica, se modifica o se diversifica el pensamiento social urbano de la clase media trabajadora, acerca de la manera de producir ingresos para la familia, ante una eventual crisis por desempleo, vienen alternativas como por ejemplo realizar estudios o cursos cortos de salida laboral rápida. Ahí entra el capital cultural institucionalizado como mediador entre la necesidad vital de una familia y la legitimidad de certificados, diplomas, títulos que han de respaldar un tipo de mercado, que sería el académico; las instituciones habilitadas para dicho curso, si están o no avaladas por el ministerio de educación o por alguna superintendencia a la cual corresponda y definirá el campo de disputa, que en este caso sería el campo laboral en una tarea especifica que requiere acreditación. La violencia simbólica se puede observar en el significado instalado e indiscutible que tienen los certificados para acreditar conocimiento, así en la práctica no sea tal, en la idea de carrera de obstáculos que todos corremos (creyendo que queremos hacerlo para lograr una movilidad ascendente de vida, porque no hay otro modo sino dentro del campo laboral capitalista) para hacer parte del sistema de asalariados acreditados institucionalmente. Y en el hábitus formado que nos traspasa, de recurrir siempre al sistema educativo para seguir adquiriendo practicas que serán retribuidas con capital económico, así la durabilidad, exhaustividad y transferibilidad como grados de eficiencia de este hábitus de “prepararse” para las necesidades del mercado laboral cobran sentido estructural. En cuanto a esto se relaciona lo afirmado por Bourdieu en el importante papel que juegan las instituciones educativas para las familias con poco capital cultural y económico, ya que para estos sectores constituye el único camino para apropiarse de los bienes culturales que dada su posición en el espacio cultural no han heredado, además de ser la vía moderna propia de sociedades industrializadas para mantener o conseguir una ubicación social en un escenario en que las condiciones objetivas y los instrumentos de reproducción se transforman.

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    1. Muy bien Rocío. La inculcación del "prepararse" como medio de mejora en la posición social y económica creo que es bien sólida y muy típica de nuestras clases medias bajas argentinas. La pregunta sería cómo se inculca, y quiénes lo inculcan. Todos lo inculcan?: desde los padres y familia, hasta los medios de comunicación, la publicidad y los líderes políticos y sociales. Una pregunta más interesante: cómo leer de acuerdo a esto las declaraciones de nuestra querida gobernadora acerca de que los pobres no van a la Universidad y de nuestro querido Mauricio acerca de qué es eso de Universidades por todos lados!!!.

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  2. Ignacio Rodriguez
    Desde mi subjetividad hay una fuerte violencia simbólica al separar o al crear las escuelas privadas que son aranceladas, encubriendo así la separación de las clases sociales por un lado las de más capitales económicos y por otro las de menores riquezas, produciendo un agujero en el sistema escolar. Esto hace referencia a la discriminación de las masas predominantes en separarse/alejarse de las personas con menores recursos económicos y culturales, porque es evidente que no es lo mismo concurrir a un colegio privado donde los recursos económicos son aportados por las mismas familias que concurren a la institución, de esta manera se sabe que el presupuesto escolar nunca va a correr riesgos de achicarse sino todo lo contrario, ante cualquier circunstancia política ese presupuesto se mantiene o en el mejor de los casos aumenta. Por otro lado el colegio estatal es prisionero de las políticas educativas del gobierno de turno por lo tanto el presupuesto en educación puede variar mucho y hasta reducirse considerablemente Por eso mismo sin nombrar ningún habitus, podemos decir que la violencia simbólica ya está expuesta ante esta separación de clases sociales.
    Dentro de este proceso de escolarización podemos detectar un habitus que se practicaba con mas fervor en tiempos pasados y que ahora con menos imposición se sigue evidenciando. El ejemplo que trato de describir es el de levantarse del pupitre y saludar con una oración hecha al profesxr y/o maestrx que entre al aula, hace notar en una escala piramidal su posición de poder en referencia a sus alumnxs. Por lo tanto tenemos para describir, una relación de poder o pedagógica, tenemos un habitus que se propaga a lo largo de los años y se reproduce de manera tal de no alterar la escala de posiciones jerárquicas que controlan a las sociedades.

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    1. En realidad la división clasista del sistema escolar entre quienes pagan y quienes no, es casi lo contrario de la violencia simbólica. No encubre ni disfraza la diferencia, sino que la consagra y hace evidente. Las acciones de inculcación que ejercen las familias para internalizar habitus en sus hijos enviándolos a la privada parten de la necesidad de diferenciarse y ascender socialmente bajo el supuesto que la violencia simbólica que se ejerce en el sistema público es deficiente para inculcar los habitus que permitan el ascenso social. La pregunta que queda es cómo son las acciones pedagógicas primarias en la familia que inculcan los habitus de jerarquía social encubriendo el privilegio? es decir encubriendo que unos pueden pagar y otros no? es decir cómo los padres disfrazan las relaciones de fuerza que hacen posible que envíen a los chicos a la privada? meritocracia? estigmatización autoresponsabilizadora de la pobreza? estigmatización del estado y lo público?

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  3. Tema: La Educación Sexual Integral, ESI, la necesidad de una educación sexual que enseñe la prevención de enfermedades de transmisión sexual, de un embarazo, más hoy en día con la desinformación que hay. Porque por más que todos tengamos internet muchxs personas no se toman el tiempo de informarse, o se dejan llevar por lo que le dicen, entonces me parece que la escuela tiene que cumplir el rol de difundir, crear un espacio que se pueda hablar sin estigmas, prejuicios, sin vergüenza sobre un hecho natural de la vida de las personas. Y no solo en una parte de la educación, es decir, por ejemplo, la secundaria, sino que desde el jardín que todos los años se den los temas con distintos enfoque y materiales que vayan acorde a la edad de lxs alumnxs.

    La violencia simbólica es la acción pedagógica que impone significaciones y las impone como legítimas. Violencia es la explotación de una clase por otra clase, también, es inculcar a los alumnos que todavía son páginas en blanco, los valores y la cultura de una clase particular, la arbitrariedad cultural de una clase particular (dominante)
    Todo poder de violencia simbólica, poder que logra imponer significaciones como legítimas, añade su propia fuerza simbólica a las relaciones de fuerza.
    A partir de esta sintaxis , podemos ver que se ejerce en él momento que los docentes no las dan correctamente o a veces directamente no la dan porque una parte dominante de la cultura no quiere que se enseñe. Si tomamos como dije anteriormente como al alumnx como una hoja en blanco, como pretendemos que él mismo pueda aprender por sí mismo temas donde necesita un docente, un especialista, un tutor, alguien que tenga la palabra autorizada, que tenga fuentes verídicas.
    “Él habitus permite acceder al sentido de nuestros comportamientos, es decir a aquella matriz de disposición que explica la forma particular que asume nuestra conducta social.” Un ejemplo en este caso, es cuando no hay educación sexual en los colegios principalmente en la primaria y en las familia de los alumnxs hay casos de abuso intrafamiliar, la nena o el nene no sabe que nadie por mas que sea un/una familiar no debe tocarlo en sus partes íntimas, pero si esa nena/nene hubiera tenido la ESI en su colegio, sabría que sus partes intimas solo pueden ser tocadas por personas que ella/el quiera, si lo hacen sin su consentimiento es abuso.

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    1. Tema importante y revelador el de la sexualidad que hoy tiene importancia por la batalla cultural acerca del arbitrario cultural que debe regir nuestra vida sexual. Pero la batalla en realidad es sobre un tema previo: quiénes pueden ser agentes de violencia simbólica sobre los menores. Una parte dice que la escuela no puede meterse y es solamente la familia la que inculca en temas como éste. Es decir se intenta deslegitimar la violencia simbólica de la escuela y consagrar como absoluta la de la familia. El habitus que se pretende inculcar con esto es que el modelo de sexualidad familiar es el único que debe ser reproducido y que la sexualidad debe ser encapsulada en el ámbito de la relación con los padres. Es un tema clave porque en la sexualidad es dónde más puede trasparentarse que es completamente arbitraria: homo, bi, trans, o disidencias sexuales muestran el carácter no necesario ni universal de ningún modelo moral de sexualidad y que los límites a la sexualidad siempre van a ser un producto social. Hasta el Siglo XVII entre los nobles todavía había matrimonios de niñitas o niñitos de 10 años !!! y nadie se horrorizaba.

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  4. Ausentismo con la “visión” de los padres
    Los “efectos” que causan en las aulas, en las familias y las sociedades las ausencias de los profesores en las escuelas.
    La primera exposición es la falta de cumplimiento con el programa establecido, el retraso de las clases impide que aprendan los alumnos y que se haga un corte entre enseñanza y aprendizaje por el cual el último es afectado, tensión entre alumnos y profesores por la repetición de discursos que escuchan en sus casas o los medios de comunicación, miradas de desconfianza, pérdida de legitimidad, etc. "El habitus que se genera son los aprendidos en la familia condicionan y determinan los aprendizajes posteriores" Por ejemplo conversaciones de los padres cuestionando las prácticas docentes y su autoridad pedagógica por que según ellos “no quieren trabajar “ o realizando comparación con los profesores de antes, que daban clases sin tantas quejas, que eran objetivos en su trabajo donde no se orientaban a ninguna política o religión. Se reproducen en alumnos por medios de redes sociales y también en clase.
    Habitus que a la vez se alimentan con discursos que presentan en los medios de comunicación como reproducción del pensamiento dominante, poniendo como ejemplo profesores que es dejan de lado las movilizaciones para seguir ejecutando las prácticas educativas de forma objetiva, teniendo una actividad desinteresada , como por ejemplo: “En la tarde del lunes el paro afectó a las escuelas públicas. En las privadas la actividad fue normal en ambos turnos”, esto lleva a significar que aquel docente que no dio clases normales sea mal visto.
    Sin embargo hay una realidad que aquellos que se quejan de los paros no cuestionan su pensamiento y esto se da porque los medios de comunicación como dice Althusser cumplen con la función de ser un aparato ideológico del estado legitimando su poder y obteniendo así una reproducción eficiente de las clases subordinadas.

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    1. Ayelen no queda claro qué habitus es el que se estaría inculcando o poniendo en acto a través de esos discursos mediáticos y de padres sobre el ausentismo docente. Es decir qué arbitrario cultural se está reproduciendo. ¿por trabajar con chicos la entrega y el sacrificio son la norma? ¿si no trabaja es vagx? ¿en el estado se hace cualquier cosa y en lo privado no? ¿es un mal ejemplo para los niños que lxs docentes desafíen la autoridad o peleen por sus derechos?

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  5. El tema que se me ocurre desarrollar es el caso de las inmigraciones, a las cuales se las estigmatiza o engloban de manera negativa sin darnos cuenta que dicha conducta (perteneciente al habitus) la tenemos presente y ayudamos a reproducir, cuestionando su historia, su posicion social a veces marginalizandolos por colectividades en las que se hayan podido crear, pensar que son delictivos o por el contrario, creyendo que le quitan puestos de trabajos a los nativos. Dichas estigmatizaciones, entre otras, provenientes de la violencia social se manifiestan tanto en la familia, la escuela, o los medios de comunicacion, en un ambito laboral, etc.

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    1. Adjunto un fragmento de video en el cual en un programa, tratandose una tematica de narcotrafico le preguntan a una persona del publico su nacionalidad
      https://youtu.be/ZST-1c27kTo

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    2. Es claro en lo que pregunta Del Moro la vigencia de un habitus tremendo: ser argentino es ser parecido a un europeo. La respuesta de la invitada muestra la arbitrariedad cultural en un momento se autocontesta No sé que es ser argentino, pero los collas, los salteños somos argentinos. Es claro que sobre la nacionalidad como en la sexualidad pesa un arbitrario cultural que es inculcado. Pero cómo se inculca esto? qué hacemos los docentes y los medios de comunicación para inculcar determinado arbitrario sobre sexualidad y sobre nacionalidad?. La discriminación directa tiene escasos componentes de violencia simbólica. Son las acciones suaves y naturalizadas las que más violencia simbólica tiene. Si decimos que los negros son vagos o incapaces hay poca violencia simbólica no mucha. Este tema es importante: los prejuicios y la discriminación o la hostilidad manifiesta no tiene violencia simbólica. No confundirse. Hay mucha más violencia simbólica cuando se elogian ciertas cosas ocultando otras que cuando se atacan o critican. Hay mucha más violencia simbólica cuando se habla de qué trabajadores y laboriosos son los bolivianos, que cuando se dice que son borrachos o ignorantes.

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  6. La educación superior en los sectores dominantes de Argentina: formación universitaria de la burguesía empresarial “nacional”.
    El habitus, entendido como una inculcación (y ocultamiento) de prácticas sociales de clase que reproducen el sistema social y las relaciones sociales de dominación , no es ajeno de los sectores con mayor poder y mayor acumulación de riquezas. No habría dominados sin dominadores. El interrogante seria: ¿qué forma particular adquiere la trayectoria formativa universitaria? ¿Cómo es que atraviesan los caminos de la educación superior aquellos sujetos que deben continuar con su alta posición social?
    Las nuevas generaciones de grandes empresarios tienen el mandato de “cuidar” el patrimonio familiar y por lo tanto, hay una inclinación por el universo de carreras relacionadas con la economía monetaria, el sector financiero y un fuerte componente de contenidos puros de la academia norteamericana o europea. Tal como fue el caso de los Chicago Boys a partir de los 70s. Ni hablar de la anulación de los factores sociales y culturales.
    Entonces, este habitus de la dominación estaría caracterizado por ser economicista, extranjerizante y anti-politico.

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    1. Excelente el análisis. Más adelante vamos a ver un estudio sobre cómo se educa en las escuelas privadas medias de elite. Pero una de las cuestiones que sin dudas desde hace mucho se inculcan es el carácter global de la ciudadanía basada en el patrimonio económico. Las clases dominantes se representan a sí mismas o se internalizan como "clases internacionales", por ello no son pocos los que envían a sus hijos a escuelas medias en Londres o EEUU o colegios que los envían temporadas de estadías en el exterior. Ni hablar de las carreras universitarias y posgrados. Nuestros actuales ministros, presidentes de Bancos Central, etc. son todxs formados profesionalmente en el exterior, en las mecas de la ceocracia mundial. En el campo cultural argentino esto es tradicional incluso más allá de los vinculados a los negocios. Hay que recordar que el Martín Fierro tuvo que tener primero éxito en España, lo mismo que Gardel o Atahualpa en Paris, antes de ser reconocidos aquí. El habitus de la búsqueda del reconocimiento en los centros de poder mundiales es algo típico de las clases altas de los países coloniales.

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  7. El tema que elegí es el binarismo de género en las practicas escolares y dentro del currículum oculto que se reproduce en la escuela. Creo que el desarrollo de diversas practicas escolares desde modelos de conducta, modos de vestir, prácticas educativas y también laborales hacen que dentro de la escuela se produzca un habitus ligado al relato cultural y religioso de género. La violencia simbólica se representa al invisibilizar a personas transgénero dentro de un modelo cisgénero teórico y práctico, practico entendido desde la admisión a espacios laborales educativos como también la ausencia o pocas matrículas para jóvenes trans , en las diversas escuelas , también desde un modelo teórico cisgénero, donde no se les contempla como “categoría” de reconocimiento identitario en la educación para los estudiantes , la ESI por ejemplo elabora una construcción marcadamente desde un lineamiento de genero binario sin dar lugar a otras identidades como la trans. Creo que la Violencia simbólica se da en primer lugar en reproducir la invisibilización a través de diversas prácticas que refuerzan un habitus primario y que el habitus secundario elaborado en los espacios educativos tienden a marcar con más intensidad lo que los jóvenes traen de estos espacios primarios como ser la familia. El habitus seria ese fruto que tiende a naturalizar las prácticas de violencia simbólica que dejan sepultados los otros cuerpos haciéndolos abyectos de la sociedad, un habitus que entiende la producción de sujetos entre hombres y mujeres y que teme a lo diverso oponiéndose de diversas maneras. La violencia simbólica se representará desde espacios más notorios como actos de discriminación por parte de profesores compañeros, hasta micro practicas dentro de un currículum oculto que instaura el negativo a lo diverso, desde por ejemplo el uso de la palabra gay entendida como un insulto hasta la no reproducción en las prácticas educativas de términos como transgénero, hermafrodita, entre otros.

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    1. El tema del binarismo como arbitrario cultural y la ESI como reproductora de ese binarismo es un tema importante. Obsérvese que los medios de comunicación han incorporado la diversidad sexual a través de las ficciones. Ahora mismo es un suceso 100 dias para enamorarse en dónde el transgenero y la homosexualidad aparecen como temas que circundan todo el tiempo a los personajes centrales. La inculcación de un nuevo arbitrario cultural multigénero no religioso proviene no de la escuela ni de la familia, sino de los medios, las redes sociales y la industria del entretenimiento que por supuesto aprovecha los vacíos de políticas públicas. El campo del arte siempre ha sido el del ejercicio de la innovación cultural y la relativización, los arbitrarios culturales generalmente comienzan a resquebrajarse a través de la expresión artística.

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  8. Para Para poder realizar el trabajo final de la materia, se me ocurrió presentarle problematizar la publicación de las pruebas aprender y la incidencia que tuvo la misma
    Se invisibilizo el contexto en el que estudian los alumnos , las luchas docentes, utilizando estos resultados para plantear una modificación en los planes de estudio a partir del ciclo lectivo 2018, asignándole una alternativa al bajo rendimiento y deserción estudiantil. La violencia simbólica se utilizó para fortalecer el escenario instalado en la crítica respecto el ausentismo docente y falta de actualización en su formación.
    Si bien se plantearon varios ejes como alternativa, me intereso centrarme en la propuesta de implementar prácticas profesionalizantes para los estudiantes que estén cursando el último año de educación secundaria, en contraturno.
    En este punto, según mi percepción, se intenta establecer un cambio cultural que naturalice que está bien que un estudiante deba trabajar y estudiar al mismo tiempo respondiendo a los intereses económicos de las políticas neoliberales que afronta nuestro país.

    A pesar que el discurso oficialista intente mediante los medios de comunicación infundir la necesidad de darle un sentido de productividad y actualización a la educación, en realidad encubre mano de obra no asalariada (representando más ganancia a la empresa) y reducción de puestos de trabajo a otros jóvenes que hayan terminado sus estudios secundarios y necesiten el empleo.

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    1. Espectacular tema el de las evaluaciones de rendimiento y de las políticas de promoción y reciclado de los estudiantes de bajo rendimiento. Habría que interrogarse sobre el habitus mismo a ser evaluado, es decir, el habitus meritocrático por excelencia. La disposición a ser evaluado no asume cualquier forma, sino una arbitraria que reproduce las relaciones de poder vigentes. Por ejemplo, la exclusión de este tema en las escuelas privadas, dónde es fácil prever que se demostraría que los chicos de privada tampoco saben mucho o tienen enormes deficiencias. El habitus de bajar las expectativas, para aquellos "que no dan" entre las clases populares, y subir las exigencias para la carga laboral docente responsabilizándolo del fracaso escolar. Ojo: como dijo Yasky el otro día, a nivel mundial se está deslegitimando la acción pedagógica personalizada que encarna el trabajo docente y se trata de instalar el sistema despersonalizado digital de acción pedagógica homogeneizadora mundial.

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  9. Mariana Denis

    Bourdieu desarrolla el concepto de habitus como un trabajo de inculcacion para la interiorización de los principios de una arbitrariedad cultural capaz de seguir perpetuandose ya que toda instancia pedagógica se caracteriza por una duración más larga porque tiende a reproducir las condiciones de su reproducción.
    En el tp final voy a trabajar sobre el programa conectar- igualdad que intento acercar a millones de estudiantes en edad escolar de escuelas públicas una computadora con la intención de alfabetizarlos en las tecnologías. Teniendo en cuenta lo que Bourdieu desarrollo los habitus con los que me he encontrado fueron los que decían que para que les van a dar computadoras si las van a terminar vendiendo o los que decían que era innecesario proveerles computadoras porque no saben usarlas y tampoco tienen ganas de aprender o otros que afirmaban que en vez de usarlas para estudiar la usaban para los jueguitos. Todos estos discursos se me asemejan a un tipo de arbitrario cultural de un grupo o una clase que piensan que ciertos privilegios solo les corresponde a unos pocos.

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    1. Excelente tema Mariana, que incluso me ha tocado investigar con mi equipo. Ya veremos textos sobre el tema. Es verdad que dentro mismo del discurso docente se pueden detectar algunos de estos prejuicios. Sin embargo, del prejuicio a la inculcación de habitus hay un trecho que es el que tenés que transitar, es decir, cómo esos prejuicios (el uso socialmente válido y productivo de la tecnología informacional está reservado a las clases medias y altas) se convierten en acciones pedagógicas de inculcación aunque sea a través del curriculum oculto. También sería bueno analizar la violencia simbólica presente en el mismo programa Conectar Igualdad y el arbitrario cultuaral que pretendía inculcar....cómo extraño esa violencia simbólica!!!!!

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  10. Susana Nicolosi
    A partir de las Leyes de Educación Nacional y Provincial, la educación es obligatoria de los 4 a los 18 años. Es así que desde el año 1996 el sistema educativo debió enfrentar el desafío de incluir a todos los alumnos que siempre estuvieron al margen de un sistema formal de educación, y además asegurar que esos niños y jóvenes permanezcan y aprendan.
    Es allí donde nos encontramos con el mayor de los desafíos, a través de las distintas políticas públicas se avanzó muchísimo en la matriculación de alumnos en todos los niveles, pero, en cambio no podemos decir por ello que los índices de adquisición de los aprendizajes hayan subido.
    En el nivel medio, por ejemplo, que no fue obligatorio hasta el año 1996, existe un crecimiento en el índice de matriculación, pero, un decrecimiento en los índices de aprendizaje. Este será el motivo de la investigación para mi trabajo.
    Asimismo podemos observar que se fue agrandando la diferencia entre los resultados académicos de los alumnos de las escuelas de gestión privada y estatal. Esta brecha generada particularmente por las condiciones de existencia de los alumnos que forman parte de las dos gestiones (destinatarios legítimos). Claramente el habitus que marcará la posición de clase de los alumnos de una gestión y de otra.
    El habitus como sistema de disposiciones permite reflexionar tanto la interiorización de la exterioridad, en la medida en que organiza las prácticas y contribuye así a la reproducción de las estructuras. Por ello, como lo afirman explícitamente Bourdieu y Passeron, “sólo una teoría adecuada del habitus (...) permite revelar completamente las condiciones sociales del ejercicio de la función de legitimación del orden social que es la más disimulada de todas las funciones ideológicas de la escuela. Por el hecho de que el sistema de enseñanza tradicional logra producir la ilusión de que su acción de inculcación es enteramente responsable de la producción del habitus culto, o por una contradicción aparente, que sólo debe su eficiencia diferencial a las aptitudes innatas de los que la sufren y que, por lo tanto, es independiente de todas las determinaciones de clase que, por estar constituido fuera de la escuela, está en la base de todas las adquisiciones escolares, contribuye de una manera irremplazable a perpetuar la estructura de las relaciones de clase y, al mismo tiempo, a legitimarla disimulando que las jerarquías escolares que produce reproducen las jerarquías sociales” (Bourdieu y Passeron, 1970: 246).

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  11. Es el temna más clásico de la sociología crítica de la educación: cómo la educación reproduce las diferencias sociales en vez de corregirlas. Pero hay que precisar más la cuestión del habitus referido a la eficacia del aprendizaje. No se trata de medir aprendizajes sino de ver ¿qué tipos de habitus de aprendizaje se inculcan en pública y privada?. ¿qué inculcan los padres referido al aprender en distintas clases sociales?

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  12. Juan Pablo Guglielmino

    El trabajo final sobre el cual vamos a trabajar va ser el de conectar igualdad que, en contra de la arbitrariedad cultural dominante de la cual habla Bourdieu, esta destinado a aquellos sectores con menos accesibilidad a conseguir una computadora. Bourdieu veia como utopico el caracter de una politica de este tipo, donde se tuvo en cuenta los intereses pedagogicos de las clases dominadas. De esta forma podemos creer que un tipo de política de este tipo esta destinado a ir en contra de la producción de un habitus de la clase dominante. Pero es importante para el desarrollo de este trabajo de que manera se llevo a cabo: como los docentes, dotados de habitus adecuados capaces de reproducir efectos contrarios al fin de esta política, no utilizaron la herramienta que se les otorgó. Tal como dice bourdieu que puede ser muy rentable para las clases dominantes cuando la accion pedagogica correspondiente se ejerce en un sistema de acción pedagógica dominado por accion pedagógica dominante y que contribuye asi, a la reproducción cultural y, de este modo a la reproducción social, asegurando a los detentadores de la adquisición previa el monopolio de esta adquisición. Tambien pensar de que manera algunas instituciones escolares contribuyeron a reproducir este tipo de monopolizacion de los materiales y de la inculcacion que las clases dominantes se creen que le son legitimos solo a ellos.

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    1. En la última unidad vas a encontrar trabajos, incluso míos sobre este tema del conectar-igualdad. Está claro que una política pública es tomada por los docentes y alumnos de acuerdo al set de habitus del que disponen y por tanto aunque el objetivo la política pública sea la inclusión digital, las prácticas concretas con las que se lleva a cabo el plan pueden reproducir todo tipo de formas de exclusión. Es un excelente ejemplo de la eficacia de los habitus aun más allá de las intenciones políticas o de las definiciones ideológicas.

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  13. Al finalizar la lectura puedo retomar un ejemplo claro de cómo se quiere instalar un habitus dentro de la sociedad en referencia al sistema educativo público. Esto se evidencia cuando un grupo de políticos establece que los accesos a la formación académica universitaria es para los sectores altos, los cuales poseen una marcada influencia tanto económica, política y en los diferentes medios masivos de comunicación. Se manifestó claramente en algunas de las declaraciones de autoridades políticas, cuando expresan que los sectores de bajos recursos no llegan a la universidad o porque tantas universidades públicas dentro del territorio. A mi parecer es claramente un posicionamiento de las fuerzas políticas por establecer ese habitus considerando que solo los sectores oligárquicos pueden continuar con la educación mientras que los sectores de la población que se encuentran en situación de pobreza no deben acceder al mismo , reforzándolo a través de los aparatos ideológicos del estado como los son los medios de comunicación hegemónicos a partir de una campaña continua de desprestigio hacia la formación académica hacia la educación pública, hacia los educadores, desfinanciando económicamente estos espacios . Tratando de instalar en ocasiones que para llegar los sujetos a tener una educación debe ser a través del esfuerzo individualista es decir instalando la meritocracia, pero el rol del estado donde estaría presente en estas políticas. ¿Donde se consideraría a todos los ciudadanos sujetos de derecho? a que puedan recibir un formación universitaria garantizando la trayectoria educativa continuas a partir de políticas inclusivas, como becas de apoyo económicos para los estudiantes que lo requieran. No estableciendo esta exclusión de los espacios académicos y responsabilizando a los mismos por no poder permanecer o acceder a esta formación, porque no se esforzaron de manera adecuada. Nos continuamos leyendo

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    1. En realidad es dudoso que las expresiones de políticos y comunicadores puedan considerarse como habitus, pues no se trata de una inculcación persistente y regular. Se trata de ver si estos temas arraigan en la agenda pública. Cabría preguntarse por prácticas más solapadas dentro de las escuelas secundarias para disuadir a los pobres de intentar ingresar a la universidad. Me parece que habría que buscar más allí los habitus que en declaraciones algo episódicas de gobernantes o políticos.

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  14. El tema que se me ocurre es la intervención de ONGs extranjeras en las discusiones sobre la educación. Si bien no aparecen como actores directos en la discusiones políticas acerca de la educación, están financiadas por el gran capital transnacional (y también algunos actores nacionales) y traen el modelo educativo (concepciones, valores, hábitus, objetivos) que quiere imponer el gobierno nacional (la meritocrácia y la educación como oportunidad, mercancía o privilegio-no como derecho-, por ejemplo).
    Un ejemplo es el de la Fundación Junior, con la cuál algunos municipios ya están impulsando relaciones, como el de Lomas de Zamora, que apareció esponzoriandolo y convocando a participar de un Foro de Innovación a nuestros estudiantes, seleccionados previamente por la escuela. Una fundación cuya sede central es de Springs Colorado de EEUU y que en la Argentina además del Municipio de Lomas de Zamora lo esponsorea American Airlines, Banco Ciudad, Banco Galicia, Macro, Banco Patagonia, Banco Piano, BBVA Francés, Carrefour, Citi, Instituto Educativo Alas, Disney, Estudio Beccar Varela, HP, HSBC, IBM, Fundación La Nación, Telecom, Master Card, Mercado Libre, Petrobras, Provincia Seguros, Johnson, Toyota. Acompañan el proyecto también: Coca Cola, La Rural, Sheraton. Y apoyan el proyecto con Becas educativas: Universidad Torcuato Di Tella, Universidad San Andrés. Muchos de sus Presidentes y asociados, están además vinculados a otras Fundaciones como Cristiano Rattazi de la Fiat, que fue Presidente entre 2011 y 2012, participó de las actividades de la Fundación Libertad junto a la derecha golpista, saqueadora como José María Aznar, Mario Vargas Llosa, Roger Noriega (ideólogo de la Ley Helmun Burton de bloqueo a Cuba, del financiamiento a la Contra nicaraguense), Macri (bueno, ya lo conocemos), Álvaro Uribe (que promocionó el voto por el No a la Paz en Colombia), Vicente Fox (Presidente de la Coca Cola y promotor del ALCA), Makfalcoff (Ideólogo de la autonomía
    de Santa Cruz en Bolivia, etc.). Es decir, la clase dominante.

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    1. http://junior.org.ar/

      Esta es la página de la ONG que nombro

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    2. Esta bien la data sobre la Fundación, pero ¿dónde está acá el habitus?

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  15. En principio el TP final que tomamos es el del " programa conectar igualdad "(PCI) el cual es una herramienta educativa adquiridas en las escuelas secundarias, las cuales complementan su equipamiento con el uso de las computadoras portátiles y trasladables, permitiendo así el uso de la tecnología tanto en las escuelas como en los hogares, y a su vez la alfabetización digital de los jóvenes; innovando así los procesos de aprendizaje en la enseñanza pública.
    Este tema se halla en contra de la arbitrariedad cultural propiamente dominante ( intereses objetivos que son materiales simbólicos )de una formación social , ya que el programa no beneficia únicamente a la clase dominante sino mas bien a los estudiantes, quienes hacen de este recurso con el tiempo mas eficaces y adaptados al mundo, pero son a su vez los responsables de hacer de ello, algo vendible y poco utilizable por el hecho de no saber usarlas o por no utilizarlas para el aprendizaje. Siendo esto algunos habitus existentes en la comunidad.
    Para simplificar, uno de los temas que llevaremos a cabo sera el planteamiento de la no utilización del beneficio en los docentes pertenecientes a la formación social, quienes instalan imposición e inculcación de arbitrariedad cultural en la educación; lo cual resulta ser una (AP) y por tanto una (V.Simbólica) debido a la presencia de las dos cosas propiamente dichas, en las condiciones sociales realizadas por un poder arbitrario de arbitrariedad cultural.

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  16. Rocío Soledad Valiente16 de octubre de 2018, 11:42

    En mí trabajo Final sobre Ausentismo docente puedo identificar que el Habitus que se intenta reproducir es la creencia de que los "Docentes son vagos ,no quieren trabajar,faltan oop cualquier cosa" (claramente dirigiéndose a los docentes de Gestión estatal)
    Los medios de comunicación y la subestimación política en sus discursos colocan a los docentes en un rol poco profesional,desconsiderado e irrespetuoso de su rol de educador frente a los alumnos.
    Siguiendo está línea ,cada vez es más típico escuchar y leer (en redes sociales) a alumnos y las familias expresar su disconformidad,sus reclamos,juicios de valor sobre la tarea docente;y en muchos casos comparando la educación publica (pauperrima por "culpa" de los docentes "vagos" que no van y los chicos pierden aprendizajes) con la educación privada (sobrevalorada solo por no adherir a los paros-adhesión causada por presiones,miedos, exigencias y/o desconocimiento de los derechos) ...

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    1. Habría que ver cómo demostrar que se trata de un habitus: que es una inculcación regular de una autoridad pedagógica y que tiene efectos de transferibilidad y exhaustividad. Yo creo que al revés: es un discurso estigmatizante que si tiene éxito es porque se apoya en habitus que la escuela misma inculca. Acatar la autoridad como parte fundamental del "trabajo". Los chicos que "trabajan" son los que "cumplen" con los "deberes", los padres que se preocupan son los que "acatan" las citaciones del docente, los alumnos que faltan no aprueban, el ausentismo de los alumnos es por vagancia, desaprensión de los padres, etc. La escuela inculca cosas de la que después los docentes estatales son víctimas.

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